Sagrado Corazón

Del Pastor

Queridos Amigos en Cristo,

Vivimos en un tiempo de mucho entusiasmo para la Iglesia en el sur de California. El arzobispo Gómez nos ha llamado a la renovación. No solo renovación de recursos, sino también a una renovación espiritual.

Como feligreses activos e involucrados, están consciente de las muchas bendiciones de las cuales tenemos que estar agradecidos aquí en nuestra parroquia Sagrado Corazón de Jesús. Ustedes y sus familias han celebrado aquí muchos ritos importantes de Bautismo y Primera Comunión. Algunos de ustedes celebraron el intercambio de votos matrimoniales en nuestra iglesia. Y otros han despedido seres queridos. La iglesia tiene un papel esencial a través de nuestras vidas.

¿Pero, ha pensado quien construyó todos los edificios que disfrutamos y usamos hoy en día?

Tal como nos beneficiamos de la generosidad de aquellos que han venido antes, nosotros también estamos llamados a renovar nuestra iglesia para que las generaciones venideras tengan un lugar para la misa y encontrarse con Dios.

Tengo placer de informarles que nuestra parroquia está participando en la campaña Llamados a Renovar. Esta campaña invita a cada uno de nosotros a considerar completamente las muchas bendiciones de Dios en nuestras vidas, y en las vidas de todas las parroquias.

Nuestra meta parroquial en esta campaña es de $215,000. Cincuenta por ciento de la meta es para nuestra parroquia. Si pasamos la meta, el cien por ciento de los fondos recaudados arriba de nuestra meta serán para la parroquia. Esto significa que tenemos la oportunidad de recaudar por lo menos $107,500 para abordar nuestras necesidades.

Les invito a tomar un momento y leer la página siguiente, y aprender como Llamados a Renovar beneficiará a nuestra parroquia, y como usaremos los fondos. Para lograr a nuestra meta, le estoy pidiendo considerar devotamente una promesa de cinco años a la campaña. Esta campaña es esencial para mantener nuestra iglesia vibrante y fuerte.

Espero que se unan a mí para apoyar a este esfuerzo histórico.

Paz en Cristo,

P. Victor Ramos